Según datos de la Fundación Internacional de Osteoartritis (OAFI), se calcula que 300 millones de personas tienen artrosis a nivel mundial, siendo ésta la primera causa de incapacidad permanente y la tercera de incapacidad laboral temporal.
Por muchos años, este tipo de padecimientos se asociaban a personas de la tercera edad; pero debido al incremento de la esperanza de vida, al calzado inadecuado, a las malas posturas y al ajetreado estilo de vida de nuestra sociedad, la artrosis ya se ha detectado en jóvenes a partir de los veinte años.
Para abordar este tema invitamos a Sandra Margarita Velázquez Rodríguez, quien es licenciada en Terapia Física, maestra en Ciencias de la Educación y docente de la Universidad de Estudios Avanzados (UNEA) campus Aguascalientes.
¿Qué es la artrosis?
Para iniciar con este tema, le pedimos a nuestra experta que nos explicará qué es la artrosis, y nos comentó que en rasgos muy generales es la patología que lastima el cartílago articular.
Para entender más a detalle el tema agregó que es necesario comprender que nuestro cuerpo esta formado por articulaciones. Estas piezas son aquellas que nos permiten el movimiento y se componen de varios elementos que facilitan su trabajo.
Absolutamente todos estos elementos son importantes y necesarios para su buen funcionamiento. Y, uno de ellos es el cartílago articular, que actúa como amortiguador para evitar que los dos huesos (o más en algunos casos) que conforman la articulación choquen entre sí.
Cuando este cartílago comienza a perder su grosor, y en algunos casos, se termina por completo, la articulación entre las piezas sufre, e impide realizar alguno o varios movimientos.
Hay casos en que es necesaria una cirugía para que una articulación vuelva a ser funcional. En este caso las estructuras no se reemplazan por tejido original, sino por tejido fabricado por el hombre.
A esta lesión del cartílago que, produce dolor, rigidez e incluso incapacidad funcional, le llamamos artrosis.
¿Cuáles son los síntomas de la artrosis?
El primer síntoma, que generalmente no solemos tomar en cuenta, es la crepitación. Esto es que, al movimiento, la articulación ¡cruje!. Dejamos esto de lado porque normalmente no causa molestia ni limitación.
El siguiente síntoma, y que en general preocupa más a los pacientes, es el dolor. Este va de forma gradual y depende del desgaste del cartílago.
Explica Velázquez que se inicia como un dolor leve, pero que en un grado avanzado, la artrosis es incapacitante: la persona que la padece sufre con cualquier movimiento, por mínimo que sea.
¿Qué puede causar a largo plazo la artrosis?
Como se comento en el párrafo anterior, la artrosis provoca un deterioro en el cartílago articular. Este cartílago le da a los huesos una especie de recubrimiento (en sus extremos), para que funcione correctamente, sin embargo, cuando este cartílago se daña puede provocar un desgastamiento en los huesos y en casos más avanzados la deformación de la articulación.
También debido a la molestia (dolor), que podemos experimentar con esta enfermedad, solemos compensar algunos movimientos con otras articulaciones. Para ser más claros, podremos un ejemplo ¿te ha pasado que cuando tienes algún dolor de rodilla o tobillo sueles poner más peso en la pierna contraria? A esto exactamente nos referimos.
Por ello, es muy importante recurrir a un tratamiento lo más temprano posible, pues esta acción de "compensación" puede generar una sobrecarga tan grande que provoque que otro elemento de tu cuerpo sea candidato a padecer artrosis.
¿Qué conocimientos tiene un fisioterapeuta?
El licenciado en Fisioterapia es un profesional capacitado para atender y resolver los problemas de salud relacionados con el movimiento.
Su nivel de actuación va desde la prevención y educación, detección y tratamiento, hasta la rehabilitación y reinserción de una persona a la vida activa. También atienden a personas con capacidades diferentes.
Para cubrir lo antes mencionado, un fisioterapeuta adquiere conocimientos de anatomía, fisiología y biomecánica del cuerpo humano. Esto quiere decir que puede determinar la forma correcta e incorrecta de realizar los movimientos del cuerpo para detectar anomalías.
Estos profesionales, al conocer los huesos y músculos, así como la función de cada uno, tienen la habilidad de detectar si algún tejido está inflamado, presenta una infección o alguna otra condición que pudiera interferir con la salud del paciente.
También cuentan con una habilidad de observación profunda para determinar los buenos o malos hábitos de las personas en sus actividades de la vida diaria.
¿Qué hace un fisioterapeuta y cómo puede ayudar en la prevención y tratamiento de la artrosis?
El fisioterapeuta, a lo largo de sus estudios, adquiere la capacidad de observar minuciosamente los hábitos del paciente, desde cómo camina, cómo se para, cómo se sienta, cómo utiliza su celular, etcétera y con ello determinar en qué forma están trabajando las articulaciones.
Para conocer de qué manera puede un fisioterapeuta ayudarte en el tratamiento de la artrosis, la especialista indicó que esta condición tiene cuatro grados:
- Primer grado: es el momento en el que inicia el desgaste articular, pero es muy leve. En este momento los pacientes no sienten dolor.
- Segundo grado: en esta etapa, el cartílago y los tejidos tienen, aún, una proporción adecuada, pero, inicia el dolor.
- Tercer grado: en éste existe una inflamación de las articulaciones debido al desgaste de la superficie del cartílago, lo que puede causar dolor con casi cualquier movimiento.
- Cuarto grado: en este momento de la enfermedad es cuando el cartílago se reduce considerablemente o por completo y es posible que vuelva las articulaciones rígidas.
Gracias a sus conocimientos, los fisioterapeutas pueden intervenir ayudando al paciente en los distintos grados de la enfermedad, ¿te gustaría saber cómo?
- Primer grado: el fisioterapeuta puede ayudar a revertir la artrosis dándole un manejo adecuado a los músculos y quitando la carga de la articulación afectada.
- Segundo grado: el profesional interviene para la desaparición del dolor; pero aún más importante, educa al paciente sobre los distintos hábitos que debe adquirir para que este problema no se vuelva a presentar.
- Tercer grado: en esta etapa, debido a que el desgaste suele ser considerable busca tratamientos más fuertes y también ayuda al paciente a prepararse para una cirugía.
- Cuarto grado: en este momento el fisioterapeuta atiende al paciente después de la cirugía para que recupere sus arcos de movimiento, fuerza y también para desinflamar los tejidos.
Ahora ya conoces qué es la artrosis y el profesional de la salud ideal para apoyarte con este padecimiento.
Para prevenirlo, nuestra entrevistada recomendó mantener una dieta saludable, practicar ejercicio moderado con regularidad, evitar permanecer en la misma posición durante largos periodos, no automedicarte y siempre mantener una actitud positiva.
Agradecemos el apoyo de Sandra Margarita Velázquez Rodríguez, licenciada en Terapia Física, certificada en Kinesioterapia, Equinoterapia, Anatomía Palpatoria y Administración Hospitalaria, y maestra en Ciencias de la Educación.
Conoce todo lo que la licenciatura en Fisioterapia de UNEA tiene para ti. ¿Tienes dudas o aportes acerca de cómo artrosis y fisioterapia se combinan para beneficio del paciente? ¡Déjanos tu comentario!
