¿Estás por terminar la preparatoria y las personas a tu alrededor te cuestionan todos los días sobre en qué universidad cursarás tu carrera? ¡Tranquilo! Lo más importante al momento de elegir una casa de estudios superiores es que selecciones el lugar que más empate contigo y con tus objetivos futuros. Dicho lo anterior, es muy importante que te informes lo más que puedas para que al momento de seleccionar una institución estés convencido de tu elección. Además, debes saber que en México hay, según datos del S istema Interactivo de Consulta de Estadístic a Educativa de la Secretaría de Educación Pública (SEP), 5,455 escuelas de nivel superior, lo que significa que tendrás que tomarte con calma el proceso de investigación para encontrar la opción ideal para ti. Recuerda que cada persona es distinta y tiene diferentes propósitos, por lo que no hay una fórmula para saber cuál es la universidad perfecta para cada individuo, ni hay sólo una casa de estudios en la que todos los estudiantes deben cursar sus carreras. Por todo lo que hemos platicado hasta ahora, hoy te daremos 9 pasos que pueden ayudarte a encontrar la universidad más afín a ti.
1. Define qué opciones académicas te interesan
Para empezar, debes tener claro, por lo menos, qué áreas de conocimiento llaman tu atención. Para esto, puedes apoyarte de pruebas de orientación vocacional en las que a través de una serie de preguntas sobre tus preferencias y tus habilidades, obtienes un reporte de cuáles son las carreras que más empatan contigo. Otra opción es que platiques con familiares u otras personas que ya se encuentren en el ámbito laboral y que hayan terminado su licenciatura para que puedan contarte sobre qué estudiaron, qué aprendieron en su carrera y cómo es el campo de acción correspondiente a ésta. Además, es una alternativa ideal para que despejes todas las dudas que tengas. Imagina que tienes en mente ciertas razones por las que deberías de estudiar Odontología y que al momento de hablar con una persona que estudió esta carrera, te das cuenta de que algunas de las cosas que pensabas estaban equivocadas y más bien deberías indagar en otras alternativas dentro del campo de la salud. También, puedes revisar la oferta académica de muchas universidades y revisar los programas educativos de los múltiples títulos profesionales que puedes obtener. ¡No te preocupes!, no se trata de elegir en ese momento qué universidad elegirás, por ahora el objetivo es sólo que puedas encontrar la institución educativa que te ofrezca lo que buscas para tu futuro. Eso sí, durante todo este proceso recuerda que no debes de revisar únicamente qué te gusta, sino también para qué eres bueno y cuáles son tus metas tanto profesionales como personales. Ten presente las competencias que te gustaría desarrollar y las capacidades que tienes que pueden ayudarte a tener éxito en ciertas industrias.
2. Analiza los programas académicos
Cuando ya tengas claro cuáles son las áreas de conocimiento que más empatan contigo, es momento de que tengas a la mano los programas académicos que ofrecen diferentes universidades para todas las carreras de tu interés. Lo más importante de este paso será que descubras las similitudes y diferencias entre los planes educativos y las anotes en algún lugar para que puedas analizarlas con detenimiento. Es fundamental entender qué enfoque tiene cada casa de estudios, por eso, al momento de revisar las cátedras que se ofrecen, deberás estar atento. En muchas ocasiones, las facultades añaden a sus licenciaturas una fuerte carga de asignaturas administrativas que pueden ser muy útiles para quienes buscan emprender o dirigir un negocio. Sin embargo, si quieres enfocarte en el lado más humano de tu título profesional, hay escuelas que se concentran más en éste. Una muestra de ello es que quienes están interesados en lo que se aprende en la carrera de Nutrición, suelen tener expectativas laborales diferentes, pues aunque muchos buscan abrir su propio consultorio y ofrecer sus servicios de manera independiente, hay quienes prefieren colaborar en instituciones de salud. Con el ejemplo anterior, podemos ver que investigar a fondo sobre las universidades, no sólo es importante para los años en los que estarás estudiando, sino para tu vida laboral en general. Sin duda, realizar este paso te ayudará a comenzar a entender cuáles instituciones educativas se acomodan más a tus planes.
3. Considera diferentes modalidades de estudio
Este tema va muy ligado al anterior, pues se refiere a que analices según tu estilo de vida y los planes que tengas a corto plazo, qué formato de estudios puede ser más cómodo y funcional para ti. Por un lado, hay alumnos que prefieren asistir de manera presencial a sus clases y realizar sus exámenes dentro de la universidad, es decir, se inclinan por un método tradicional. Sin embargo, hay quienes optan por una Licenciatura Ejecutiva, que significa que sólo tienen que acudir los sábados a las instalaciones y el resto de la semana pueden estudiar desde el lugar en el que estén. Otra característica es que los programas académicos de este tipo de carreras son modulares, por lo que tendrás que concentrarte en pocas materias a la vez y esto facilita su comprensión. Por último, también puedes obtener tu título profesional estudiando en línea. Esto quiere decir que no tendrás que desplazarte nunca, pues podrás cursar todas tus clases donde te encuentres y a la hora que tengas disponible. Si alguna de estas opciones empata con lo que necesitas, entonces deberás asegurarte de que las facultades que estás revisando puedan ofrecerte esta forma de aprendizaje. Eso sí, es importante que sepas que todas estas alternativas cuentan con validez oficial, por lo que debes elegir pensando en lo que sea mejor para ti en tu día a día.
4. Revisa la ubicación de las universidades y qué tan viable es que las escojas
Otro de los puntos importantes que debes considerar al momento de elegir dónde cursarás tu licenciatura, es la ubicación de las facultades que te interesan. Cabe mencionar que no significa que debes descartar una institución educativa porque esté lejos. La idea es que construyas un plan en el que especifiques cómo le harías para llegar a cierto plantel y cuánto tiempo te tomaría. Asimismo, debes entender qué implicaría mudarse a otra ciudad o estado en caso de que la institución educativa que tengas en mente no esté en el mismo lugar donde vives. Esto te ayudará a visualizar qué tan viables son tus opciones. Cuando analices los diferentes escenarios, toma en consideración todas las responsabilidades que tengas que atender, lógicamente, además de tus estudios y otras actividades que sean importantes para ti, como hacer ejercicio, convivir con tus amigos o tomar clases de algún idioma. No olvides que la universidad por la que te decidas será el lugar al que asistirás algunos años, por lo que deberás estar muy convencido de tu decisión. Asegúrate de que los costos y el tiempo que implicará desplazarte sean viables y descarta las opciones que no te funcionen.
5. Examina tu presupuesto
Antes de escoger una universidad, es importante que tengas algunos datos: cuánto presupuesto tienes disponible para tu licenciatura, si considerarías trabajar para apoyar tus gastos y cuál es el costo de asistir a las facultades que hasta ahora siguen en tu lista de opciones posibles. Para empezar, pide la información correspondiente en cada una de las universidades y trata de platicar con algunos alumnos para que puedan orientarte sobre otras tarifas que se tienen que cubrir como uso de laboratorios, materiales o ciertas herramientas de aprendizaje. Tener el panorama completo te ayudará a tomar mejores decisiones. Ten presente que colaborar en una compañía puede ser una excelente opción para que puedas cumplir con algunas cuotas. Además, impulsará tu crecimiento profesional, pues ganarás experiencia mucho antes que tus compañeros que se esperan a terminar su licenciatura para comenzar a buscar un empleo. Otra ventaja de estudiar y trabajar simultáneamente es que desarrollarás habilidades que serán muy beneficiosas para tu vida, como la capacidad de organizar una gran cantidad de tareas e incrementar tu productividad laboral. Por otro lado, también es importante que busques otras maneras de costear tus estudios. Con esto en mente, en el siguiente punto te explicaremos qué opciones pueden ayudarte.
6. Infórmate sobre becas e instituciones que ofrecen apoyo económico para estudiantes
No contar con el presupuesto suficiente no es para nada una razón que deba hacerte desistir de tu meta de obtener un título profesional. Si este es tu caso, investiga sobre las diferentes becas que muchas universidades otorgan a sus alumnos. Muchas veces esto puede ser la solución para que elijas realmente la casa de estudios que tenías en mente. Aunque en cada institución las alternativas pueden cambiar, por lo general hay 3. A continuación te hablaremos un poco sobre éstas.
I. Beca académica
Se otorga a un cierto número de personas que han demostrado un desempeño sobresaliente en sus estudios o que hayan obtenido una calificación destacada en su examen de admisión. En este caso, cada universidad determina el promedio por el cual un individuo se puede hacer merecedor de este apoyo, así como el puntaje que se debe obtener en la prueba de ingreso para que un individuo pueda solicitar la ayuda económica. Asimismo, cada institución decidirá qué porcentaje de la matrícula puede otorgar. Eso sí, los estudiantes que sean elegidos para tener esa beca deberán mantener un buen promedio a lo largo de su carrera.
II. Beca deportiva
¿Tienes talento especial para alguna disciplina deportiva? Si demuestras tener habilidades para alguna de éstas como el fútbol, básquetbol, voleibol, entre otras, podrás también recurrir a un apoyo económico. Lo primero será que hagas algunas pruebas de condición física y demuestres tus competencias. Tras ser evaluado, las instituciones educativas podrán hacerte una oferta con base en el potencial que tienes y lo que puedas aportar al equipo de la universidad. Ten en cuenta que debido a que representarás a tu universidad, será necesario que acudas a ciertas horas de entrenamiento por semana y que te comprometas a asistir a los torneos y competencias que se te indiquen.
III. Beca cultural
Si lo tuyo no es el ámbito deportivo, también hay opciones para quienes tienen buenas capacidades para el teatro, la danza o la música. Al igual que en la beca que platicamos anteriormente, el proceso para solicitar este apoyo económico comenzará con una demostración de tus capacidades. De esta forma, las universidades tendrán las herramientas para determinar cuánto pueden aportarte. También será importante para conservar la ayuda durante toda tu estancia en la universidad que acudas a todos los ensayos que se te pidan y participes en los eventos y presentaciones que la universidad solicite. Si hasta ahora ninguna de estas opciones es funcional para ti, ¡no te preocupes! Hay muchas instituciones financieras que se dedican precisamente a ayudar a personas que quieren cursar una licenciatura, con el pago de sus estudios. Estas organizaciones crean, en conjunto contigo, planes que se adecuen a tus necesidades y a tu situación económica. De esta forma, poco a poco podrás ir cubriendo tu deuda y no tendrás que preocuparte por dejar incompletos tus estudios. Es muy importante que revises a detalle lo que las diferentes empresas pueden ofrecerte, pues aunque todas tienen en común apoyarte con tus gastos universitarios, puede ser que haya pequeñas diferencias entre lo que te ofrecen que al final pueden marcar la diferencia.
5. Pregunta sobre las instalaciones
Las instalaciones, aunque en muchas ocasiones suelen considerarse como un extra, deben ser valoradas como un elemento importante que tiene que revisarse al momento de elegir una universidad, pues pueden potenciar tu crecimiento profesional o, por lo contrario, no brindarte las oportunidades que buscas. Tener una biblioteca que pueda darte las herramientas para realizar tus proyectos, una sala de computación que te permita hacer investigaciones en medios digitales o una cafetería en la que puedas disfrutar de momentos de relajación, es fundamental para la vida de estudiante. Asimismo, dependiendo de la licenciatura que te interese cursar, habrá algunos instrumentos que pueden ayudarte a cumplir muchos de tus objetivos. Por ejemplo, si decides estudiar Ciencias de la Comunicación, tener un estudio fotográfico o una cabina de radio en donde puedas aprender y practicar, es un gran valor agregado. Eso sí, no dejes de lado también otro tipo de instalaciones que puedan ayudarte en tu camino en la universidad, como las canchas deportivas, ya que aunque no tienen que ver con tu desarrollo académico directamente, hacen que tu experiencia sea más integral.
6. Investiga si las instituciones educativas tienen convenios con otras universidades
Muchos estudiantes tienen entre sus propósitos de vida estudiar en otro país. Si este es tu caso, debes averiguar si las casas de estudios que te interesan pueden ayudarte a cumplir este objetivo. Incluso, si nunca habías considerado la opción de cursar algún semestre en el extranjero, es fundamental que conozcas todo lo que las universidades pueden ofrecerte. Con esto en mente, lo ideal también será que tengas claro en qué países te gustaría vivir la experiencia de un intercambio académico y revisar si las instituciones educativas que estás considerando tienen o no una alianza con universidades de esas naciones. Esto es especialmente importante porque algunos alumnos tienen la intención de cursar cierta asignatura en otra región o buscan practicar algún idioma en específico, pero pueden sentirse defraudados si al no preguntar con anticipación, se dan cuenta de que su universidad no puede apoyar su meta.
7. Averigua sobre la posibilidad de aprender idiomas
A medida que el mundo laboral se transforma y las industrias del mercado global evolucionan con el paso del tiempo y el impacto de la tecnología, cada vez es más necesario que profesionales de todas las ramas conozcan sobre algunos idiomas. Si bien para algunas carreras universitarias es necesario hablar ciertas lenguas extranjeras, para otras será una cuestión más opcional; pero vale la pena que investigues si las instituciones educativas que estás considerando tienen un centro de idiomas o cuentan con clases o algunas actividades que te ayuden a practicar o mejorar tus conocimientos en un idioma en particular. No olvides preguntar cuáles son los horarios y los costos para que puedas determinar si las opciones que se ofrecen son afines a ti.
8. Verifica que cumplas con los requisitos de admisión
Sin duda, los requisitos de admisión son elementos que no deben pasar desapercibidos cuando estés por elegir la institución educativa donde cursarás tus estudios superiores, pues de nada sirve que tomes esta decisión, si no logras entrar por no tener listos los documentos o exámenes que pida la universidad. Además, se trata de una cuestión muy simple que incluso puedes consultar por Internet o por teléfono. Asegúrate de anotar todo lo necesario para inscribirte y de preguntar cuáles son las fechas límite para completar cada parte del proceso de inscripción. En caso de que te falten algunos de los requerimientos, ¡no te preocupes! Tómalo con calma e investiga cómo puedes conseguirlos. Lo más importante es que construyas poco a poco el futuro con el que sueñas.
9. Analiza todas tus opciones
Ahora que ya revisaste cuáles áreas de conocimiento son las que más empatan con tus intereses, habilidades y metas, investigaste sobre las modalidades de estudio, planes académicos y ubicación de las facultades que llaman tu atención, entre muchas otras cosas, ¡es momento de elegir! Organiza toda la información que obtuviste de las universidades, o por lo menos de aquellas que aún tienes en mente tras tu investigación, en un sólo lugar y comienza a hacer una lista de cuáles son las ventajas y desventajas de cada institución. Esto te ayudará a ver con más claridad cuáles son las opciones que verdaderamente son funcionales para ti. Una vez que tengas los pros y contras de cada lugar, reflexiona sobre cuáles son tus prioridades para que puedas comenzar a descartar opciones. Por ejemplo, si decides cursar la licenciatura en Psicología y una de las universidades que estás considerando tiene convenios con algunos organismos de tu interés para que trabajes ahí, sin duda debes priorizar ésta sobre otras alternativas. Si tienes siempre presente cuáles son los propósitos personales y profesionales que quieres cumplir y cuáles son tus habilidades e intereses, no deberá ser complicado que concretes este proceso con éxito.
¡La universidad perfecta para ti!
¡Listo! Estos fueron 9 pasos que pueden ayudarte a tomar la mejor decisión sobre qué universidad elegir para cursar tus estudios superiores. Recuerda que es importante que no hagas esta elección de forma improvisada ni impulsiva, trata de tomarte todo el tiempo necesario para revisar tus opciones. De igual manera, no dudes en acudir a un profesional o a tus familiares en busca de apoyo, pues en muchas ocasiones hay dudas que sólo alguien que ya obtuvo su título profesional puede ayudarte a entender. Eso sí, no dejes que experiencias que son muy particulares puedan hacerte desistir de una de tus opciones; por ejemplo, algunas veces las personas no están satisfechas con una clase en particular o con la forma de instruir de un profesor, pero eso no significa que una institución no sea de calidad. Guíate por todas aquellas cosas que buscas en el futuro; si la universidad que eliges puede impulsarte a conquistar tus metas, entonces estás tomando la decisión correcta. Recuerda que un título profesional puede abrirte muchas puertas y ser el comienzo de muchos éxitos en tu vida que no sólo serán una gran satisfacción para ti, sino para todas las personas que te han apoyado en el camino. ¡Es momento de empezar a estudiar y alcanzar tus objetivos! ¿Te pareció interesante este artículo? ¿Tienes alguna duda o te gustaría compartir alguna experiencia con nosotros sobre este tema? ¡Escríbenos en la sección de comentarios! Nos encanta estar en contacto contigo.